Expertos de 18 universidades de países de Europa y América analizaron, durante la jornada que inició en Quevedo y culminó en Quito, las herramientas pedagógicas que permitan mejorar las capacidades de adaptación a las variaciones climáticas que experimenta el mundo.

La Dra. Pilar Paneque, Coordinadora general del Proyecto CARE y académica de la Universidad Pablo Olavide (UPO) de Sevilla, España, indicó que en este segundo encuentro que se celebró en Quevedo (UTEQ) y Quito (UTE) se trabajó en la perspectiva de aprender a manejar las herramientas pedagógicas que permitan generar esa cultura de resiliencia o adaptación a los efectos del cambio climático.

Este taller está dirigido a profesores que pertenecen a las distintas universidades participantes en el proyecto para aprender a manejar la herramienta y el siguiente workshop, que será en Medellín Colombia, será con estudiantes de todos los países intervinientes, para que ellos trabajen con esta herramienta que estamos aprendiendo a manejar con ayuda de especialistas en el tema. Paneque agregó que probablemente la mejor estrategia para enfrentar el cambio climático, es mejorar nuestra capacidad de adaptación a esa realidad, intentar mejorar nuestra resiliencia, y para eso es muy importante el trabajo que se puede hacer a escala local. Por eso en el proyecto no solo se trabaja en el ámbito científico y académico, sino que también se ha involucrado a otros agentes sociales como distintas organizaciones no gubernamentales tanto en América Latina como en Europa que trabajan con comunidades y actores locales para la mejora de la resiliencia, para desarrollar todo el potencial que se tiene a nivel local para enfrentar los efectos del cambio climático, indicó la profesional española. Por su parte, Ingrid Roche, docente de la Universidad de la República (Uruguay) manifestó que esta temática ha tomado mucho impulso desde la última década en virtud de las afectaciones que existen a nivel de varios rubros de producción, epecialmente en la agricultura. Las variaciones climáticas que derivan en sequias, inundaciones, problemas de vientos, tornados se han vuelto más intensos y frecuentes, y eso ha hecho que se tome muy en cuenta este tema. Entonces paralelamente a las convenciones internacionales de UNESCO que empiezan a darle importancia a la adaptación al cambio climático y la resiliencia en las ciudades empiezan a crearse los planes y políticas nacionales que den respuesta al cambio climático. La profesional uruguaya indicó que como se trata de resiliencia urbana, el tema que más se ha desarrollado es el de inundaciones en las ciudades que siempre ocurren en donde se asientan familias pobres. ´Los planes principales son de relocalización, estudios de niveles de inundaciones, la parte científica, llevará la cartografía, hacer un sistema nacional de emergencia para tomar las medidas de prevención de riesgo y luego esta se incluyan en la planificación urbana para mitigar los riesgos sobre todo las poblaciones socialmente más vulnerables`, dijo la Dra. Roche. Otro tema que se analiza como estrategia para la adaptación urbana al cambio climático es la renovación de energía. En Uruguay, por ejemplo, como se tiene condiciones favorables se ha implementado una energía eólica y solar pero sobretodo eólica, lo cual hace que en este país el 95% de la energía sea con recursos renovables, expresó Roche. Pilar Paneque, expresó que el cambio climático nadie lo puede negar, la realidad la estamos viendo continuamente en las noticias, en todo lo que pasa en nuestro entorno. El Proyecto CARE UPO-UTEQ forma parte de un cambio más amplio, lo que llamamos cambio global, donde se aceptan a todos sectores de la sociedad, a todas las escalas, y donde todavía hay una gran incertidumbre sobre qué ocurrirá en el futuro y se trabaja con distintos escenarios entre ellos el académico y científico para luego llegar a las comunidades y actores sociales.